México bárbaro fue publicado en Estados Unidos en febrero de 1911. Desde el prefacio de la obra, el autor informa a los lectores que su propósito es develar el sistema político y económico de Porfirio Díaz. En consecuencia, da cuenta del sometimiento de la población, que el periodista atestiguó en Yucatán y en Valle Nacional (Oaxaca). Con información detallada y bien documentada tanto de las plantaciones como de la explotación, Turner describe cómo los dueños, políticos y militares obtenían beneficios del sistema de esclavitud reinante. Asimismo, pone de relieve la prevalencia de los intereses económicos y corporativos de Estados Unidos, que siempre beneficiaron al dictador, y la forma en que Díaz y sus colaboradores lograron acallar las conciencias y amordazar a la prensa opositora de ambos países, con lo cual se evitó que la opinión pública mexicana y estadounidense se enteraran de cómo la maquinaria gubernamental perseguía sin tregua a los enemigos del régimen.